Betsy Kiunisala Medalla está creciendo Equipo Nacional de Natación en Aguas Abiertas de Filipinas desde ceroUn contingente cada vez más global de "petroleros" con raíces filipinas puebla la escena competitiva de la natación en piscina.En mayo pasado, Chloe Isleta, nadadora filipina y graduada de la Universidad Estatal de Arizona en 2020, ganó el oro en los 50 metros estilo libre en los 31.º Juegos del Sudeste Asiático (SEA) en Hanoi, Vietnam.Antes de comenzar su segundo año en Notre Dame, la nativa de Manila, Jessica Geriane, también recolectó medallas en Hanoi, incluida la plata por un récord nacional de 50 metros de espalda.La dos veces medallista olímpica y poseedora del récord canadiense Kayla Sánchez recibió su liberación de Swimming Canada en junio pasado.En julio, la filipina nacida en Singapur y criada en Canadá anunció que representaría a Filipinas en el futuro.Sánchez no es el único nadador de la diáspora filipina que ha entrenado o nadado para Filipinas.Remedy Rule, nativo de Virginia, obtuvo la doble ciudadanía para nadar bajo la bandera filipina en los Juegos de Tokio.Luke Gebbie, con sede en Australia, fue otro miembro del equipo nacional de natación de Filipinas presente, rompiendo su propio récord nacional de 100 metros libres.En el otoño de 2020, Desirae Mangaoang, nativa de Carolina del Norte, se matriculó en Texas A&M después de ingresar a FINA World Juniors bajo la égida de la Federación de Natación de Filipinas y ganar la plata en los Juegos SEA de 2019.El equipo de la División I de UC San Diego cuenta actualmente con tres atletas de ascendencia filipina criados en la costa oeste: Teagan Monroe, Luke Pusateri y Miranda Renner.Los tres nadadores han nadado con la selección nacional de Filipinas.Antes de que existiera un programa dedicado a la natación en aguas abiertas en Filipinas, el país desviaba el talento nacional de la piscina a carreras de 5K y 10K en eventos como el Campeonato Asiático de Natación en Aguas Abiertas.Pero a medida que se acercaban los Juegos SEA de 2019, Philippine Swimming Inc. (PSI), el único organismo rector de los deportes acuáticos de la nación, se volvió más deliberado sobre el desarrollo de atletas especializados en aguas abiertas.Las competencias se llevarían a cabo en Subic, Filipinas, y una maratón de natación de 10 km (solo para hombres) estaba programada por primera vez.PSI miró a Betsy Kiunisala Medalla.En solo cinco años, el nadador de aguas abiertas, director de carreras, triatleta, activista medioambiental y entrenador de natación filipino había avivado la manía de las aguas abiertas en Filipinas.La entidad invitó a Medalla a preparar a dos nadadores nacionales masculinos, Joboy Gonzales y Ron Jarius Villamor, para los Juegos SEA 2019.Ninguno de los atletas de billar había entrenado antes para una carrera de 10 km.Con la ayuda de Medalla, ambos lograron récords personales en los 10 km en los Juegos luego de 50 días de preparación.Ahora, como entrenadora oficial del nuevo Equipo Nacional de Natación en Aguas Abiertas de Filipinas, Medalla está adoptando un enfoque desde cero para garantizar el futuro del deporte en el país.Ha terminado efectivamente con el préstamo de atletas de otros eventos y está formando un equipo que puede enfocarse y desarrollar la unidad.En segundo lugar, su objetivo es encontrar su talento en casa.Está convencida de que la escasez de nadadores de aguas abiertas de competencia internacional en Filipinas no se debe a la falta de interés o habilidad.Simplemente no ha habido suficientes eventos nacionales de aguas abiertas para brindar a los nadadores el entrenamiento y la exposición necesarios para las carreras de larga distancia.“En Filipinas, solo hay una carrera de 10 km en aguas abiertas, y es la mía”, dice Medalla, y agrega: “Todos sabemos que nos desempeñamos mejor si tenemos una meta en mente;No podemos seguir entrenando sin un objetivo”.Y cuando hay oportunidades para nadar en aguas abiertas, los atletas necesitan tiempo para aprovecharlas.Idealmente, Medalla comenzaría a trabajar con nadadores cuando tengan entre 14 y 16 años.Ella cita el ejemplo de William Yan Thorley de Hong Kong, quien quedó tercero en una competencia regional a los 13 años. Cinco años más tarde, el niño de bronce estaba en los Juegos Olímpicos de Tokio.Medalla sabe de primera mano lo que se necesita para cumplir con las exigencias de la natación en aguas abiertas de larga distancia.En febrero de 2014, la madre de dos hijos de cinco pies y nada, que entonces tenía 44 años, se convirtió en la primera persona asiática en completar el viaje de más de 7 kilómetros desde la histórica Robben Island hasta Bloubergstrand Bay en Sudáfrica.Se preparó para el baño invernal sentándose en tinas de hielo y pasando dos semanas en la montañosa ciudad de Baguio con su compañero de entrenamiento Julian Valencia para dar vueltas en condiciones de 10°C/50°F.Medalla y Valencia prevalecieron en su desafío, emprendido para expresar el agradecimiento de Filipinas a Sudáfrica por brindar ayuda exterior después de que el súper tifón Yolanda devastara la nación insular en noviembre de 2013. Los nadadores también rompieron barreras para la región de Asia-Pacífico, que contiene el 60%. de la población mundial y la mayoría de los ambientes marinos del mundo, sin embargo, representa el 61% de los incidentes de ahogamiento anuales del mundo y sigue estando subrepresentado en los deportes acuáticos competitivos.Medalla creció en la ciudad capital de Manila, donde las piscinas públicas de 50 metros y las aguas naturales para nadar eran y siguen siendo limitadas.Pero Edward Kiunisala, el padre de Medalla, era un nadador nato criado en la redonda isla de Camiguin en la costa norte de Mindanao.Quería que sus hijas aprendieran a nadar, así que tan pronto como los Kiunisala pudieron pagar una casa en la ciudad, compraron una casa con una piscina de 10 metros en la parte de atrás.Foto cortesía: Betsy Kiunisala MedallaLas tres hermanas Kiunisala se convirtieron en nadadoras de piscina competitivas.Medalla estaba en el equipo juvenil nacional de natación de Filipinas a los 12 años y pasó a ser capitana del equipo de natación de la Universidad de Filipinas mientras se especializaba en Psicología.Después de graduarse de la universidad, compitió con el Equipo Nacional de Natación de Filipinas antes de progresar en una carrera de marketing internacional y tener una familia.Poco a poco, los compromisos de Medalla la alejaron de la natación.Cuando comenzó a andar en bicicleta para recuperar su estado físico, sus amigos le sugirieron probar un triatlón y usar su aptitud para nadar como ventaja.Así fue que a los 38 años en 2009, ingresó a su primer triatlón en Subic.Saltó al océano para la etapa de natación de 1.500 metros, pero se detuvo en seco cuando el lecho marino se hundió y todo se volvió negro.Se descongeló después de que pasaran algunas personas y su lado competitivo entró en acción. Su siguiente pensamiento fue: Me encanta esto.Después de quedar en segundo lugar en su grupo de edad en el triatlón, Medalla comenzó a ayudar al club Army/Navy South Triathlete a refinar sus brazadas, publicando videos con comentarios sobre temas como la conducción baja y las patadas de ciclistas o corredores en el agua.Comenzó un blog llamado "Solo agrega agua" y expresó su indignación cuando los alumnos de la Escuela Secundaria de Ciencias de Filipinas, su alma mater, obtuvieron fondos del gobierno para construir la primera piscina cubierta de 50 metros del país en Quezon City y luego la dejaron en barbecho.(La piscina finalmente recibió reparaciones, pero nunca se abrió al público como se esperaba).Las actividades de Medalla cobraron impulso en la escena deportiva de Filipinas, obteniendo invitaciones para escribir para revistas y dar conferencias sobre natación.Hizo la transición de la vida corporativa a la de entrenadora de natación a tiempo completo, y pasó de ser una ex competidora de piscina a una atleta de aguas abiertas y directora de eventos.Lo que había llevado a Medalla a través de las partes más difíciles de su nado en Robben Island en 2014, frío y lleno de tiburones, fueron recuerdos de unas vacaciones familiares en Caramoan, una península con islotes dispersos como bombones exuberantes en un parque nacional de piedra caliza y lagunas de arrecifes de coral.Cuando los pies de Medalla tocaron tierra, estaba a medio camino de crear un desafío en aguas abiertas en su propio país, un archipiélago de 7107 islas.Y una vez de vuelta en Filipinas, Medalla se asoció con la provincia de Camarines Sur para organizar una carrera de natación en Caramoan.Usando componentes de las regulaciones de la FINA y los estándares internacionales de triatlón, creó un protocolo de evento y reunió un sólido personal de seguridad.Después de un exitoso evento inaugural en octubre de 2015, la asistencia a las carreras de Caramoan creció exponencialmente, con un tercio de los participantes volando desde países extranjeros.En junio de 2016, Medalla lanzó el "Desafío VIP" de carreras de 2,5 y 5 kilómetros en Lobo, Batangas, que se llevó a cabo en el Pasaje de la Isla Verde (VIP), conocido por la biodiversidad, la productividad y las corrientes medias de los peces costeros.En abril y mayo de 2017, Medalla agregó las carreras El Nido 4K, 8K y 12K a la serie que llamó Swimjunkie Challenge.Antes de cada evento, el equipo organizador aprovechó para ofrecer una decena de huevos y cestas de frutas al Real Monasterio de Santa Clara de Manila en un llamamiento al buen tiempo, el único elemento que se dejaba al azar.Una comunidad de natación en aguas abiertas se formó en torno a las oportunidades de natación creadas por Medalla, lo que se duplicó como un campo de fuerza de administración ambiental creando conciencia sobre problemas como los desechos plásticos y la escorrentía de la minería de oro.Las ganancias de la carrera se destinaron a organizaciones como la institución SEA-VIP para la Ciencia, la Educación y la Defensa en el Pasaje de la Isla Verde y la organización civil Bantay Dagat de pescadores voluntarios que luchan contra la pesca con dinamita y las capturas excesivas.En 2020, la pandemia puso todo en un estado de suspensión, pero cuando el mundo comenzó a resquebrajarse nuevamente, Medalla organizó la serie Strong Shoulders de nado de 1,5, 2,5 y 3,5 kilómetros para ayudar a las personas a regresar al agua.Un año después, en 2021, creó la Philippine Openwater Swim Crossings Association (POSCA) para estandarizar y certificar los nados en solitario más largos y difíciles que se pueden realizar en cualquier momento.Una junta de colaboradores se unió a Medalla, incluida su hermana Yvonne, una comercializadora con conocimientos sobre todos los aspectos de la coordinación de eventos de natación.Medalla probó un cruce de 3,5 kilómetros del Estrecho de Maricaban en febrero de 2022 y lanzó el nado en marzo desde la playa de guijarros y arbolada en Planet Dive Resort, un grupo de villas de la vieja escuela con duchas al aire libre en la punta de la península de Anilao en Mabini, Batangas.Mientras que los cruces instantáneamente populares se rompen para habagat, la temporada de tifones, Medalla estará ocupada reanudando el Swimjunkie Challenge con los nados de 5K y 10K de Caramoan este 16 de octubre.Cuando no está dirigiendo o entrenando carreras, Medalla pasa su tiempo pilotando rutas inexploradas bajo su propio riesgo y, a menudo, por su propia cuenta.Ella imagina tener una carrera en Camiguin en honor a su difunto padre, su primer maestro de natación y respetado periodista de investigación.También quiere generar más eventos en el resto de la región sur de Mindanao, una vez que descubra cómo hacer que los costos de viaje y la logística sean más razonables.Foto cortesía: Betsy Kiunisala MedallaMedalla está aplicando los mismos esfuerzos de base que ha utilizado para hacer crecer la comunidad filipina de natación en aguas abiertas para cultivar un nuevo equipo nacional dentro de ella.Realizó las primeras pruebas nacionales de natación en aguas abiertas en junio de 2021. Se presentaron veintisiete candidatos, en su mayoría de las provincias del sur.Reclutó al finalista masculino en primer lugar, Joshua del Rio de Davao, y a la finalista femenina en primer lugar, Hannah Sánchez, de 17 años, también una consumada nadadora en piscina, de Manila.El tercer compañero de equipo autorizado por la Comisión de Deportes de Filipinas fue Ron Jarius Villamor, de 20 años, quien compitió en el maratón inaugural de natación de 10 km en los Juegos SEA de 2019.Medalla necesita dos o tres nadadores más para un equipo completo.La tarea que queda es asegurar más patrocinios corporativos.El tipo de patrocinadores necesarios para llevar a cabo eventos a gran escala y un programa competitivo internacional a largo plazo están comprometidos con los eventos y atletas de ciclismo, carrera y triatlón.Pero incluso cuando Medalla compite y lucha por los patrocinadores, está agradecida de trabajar con un liderazgo que apoya sus planes para desarrollar una base sólida para la natación en aguas abiertas en Filipinas para que el resto pueda seguir.Confía en que Filipinas tiene el potencial y la pasión para convertirse en un centro de natación en aguas abiertas de la región de Asia y el Pacífico y en un generador de contendientes olímpicos en este deporte.Bienvenido a nuestra comunidad.Te invitamos a unirte a nuestra discusión.Las pautas de nuestra comunidad son simples: sea respetuoso y constructivo, mantenga el tema y apoye a sus compañeros comentaristas.Comentar significa que estás de acuerdo con nuestros Términos de usoBienvenido a nuestra comunidad.Te invitamos a unirte a nuestra discusión.Las pautas de nuestra comunidad son simples: sea respetuoso y constructivo, mantenga el tema y apoye a sus compañeros comentaristas.Comentar significa que estás de acuerdo con nuestros Términos de uso